5 simples pasos para hacer tu propio terrario casero

Probablemente has visto pequeñas plantas dentro de recipientes transparentes que se usan para adornar interiores. Se trata de terrarios, una forma elegante y creativa de tener un jardín en miniatura en cualquier lugar que desees.

Así que, si quieres encontrar una forma más sencilla de disfrutar de la jardinería, tener un terrario casero es la solución. A continuación, hablaremos de las características y beneficios de tener un terrario. Además, te contaremos qué materiales y plantas vas a necesitar para, finalmente, enseñarte cómo armarlo en 5 sencillos pasos.

¿Qué es un terrario?

Un terrario consiste en un pequeño ecosistema de plantas y tierra dentro de un recipiente transparente. En pocas palabras, son minijardines mucho más sencillos de cuidar y mantener que los convencionales. Además, son populares como elementos decorativos y por ser una excelente idea de regalo.

Podemos distinguir dos tipos de terrarios:

Abiertos, ideales para plantas más adaptadas a climas secos y que no requieren de tanta humedad. Por esta razón se crean en recipientes abiertos donde pueda correr fácilmente el aire y puedan recibir mejor luz solar directa.

Puede que requieran de mayor riego que los terrarios cerrados, pero tampoco serán grandes cantidades ni tan seguido.

Cerrados, perfectos para plantas de zonas tropicales o que requieren de condiciones húmedas.

Tener un terrario cerrado permite una mejor circulación del agua, es decir, se puede presenciar el ciclo del agua a pequeña escala. Esto se da ya que la humedad del suelo se evapora gracias a la temperatura dentro del terrario. Luego, este vapor se condensa en las paredes del recipiente hasta que, finalmente, vuelve a las plantas y al suelo.

Beneficios de tener tu propio terrario

  • Son una opción fácil y económica para las personas que quieren disfrutar de la jardinería, pero no cuentan con el espacio suficiente o el tiempo disponible.
  • Puedes ser creativo y hacerlo según tu propio estilo. Tienes total libertad para decorarlo con los implementos que desees y así darle tu toque personal.
  • Son bastante autosuficientes y fáciles de cuidar. Además, duran bastante tiempo gracias al cómodo hábitat en el que se encuentran las plantas.
  • Añaden un poco de vida y naturaleza a tu hogar u oficina. Gracias al poco espacio que ocupan es un óptimo elemento de decoración.
  • Armar tu propio terrario será una actividad relajante que te llenará de gratificación cuando veas el resultado.

¿Qué materiales necesitas?

Ahora sí, para que te aventures en esta idea de armar tu propio terrario en casa, vamos a contarte qué materiales necesitas tener a la mano y cuáles serán sus funciones dentro de este pequeño ecosistema.

Recipiente

Primero debes elegir el contenedor en el que estará tu jardín en miniatura. Hay muchos estilos entre los que puedes escoger, pero te recomendamos que sea preferiblemente un recipiente de vidrio.

Además, puedes utilizar elementos que ya tengas en tu casa, como un jarrón que no esté en uso, un frasco como en el que vienen los pepinillos o incluso hasta un vaso de cristal.

Como ya mencionamos, los terrarios se pueden crear tanto en recipientes cerrados como en abiertos. En ambos casos, procura considerar el tamaño de la abertura, es decir, que sea lo suficientemente amplia para que pueda entrar tu mano. Así podrás alcanzar cómodamente el interior para colocar y mover materiales según sea necesario.

Piedras pequeñas y grandes

Claramente el recipiente no tendrá orificios de drenaje en la parte inferior, por lo que es importante crear una capa que se encargue de esta función. Para ello, utilizaremos piedras pequeñas que también nos ayudarán a dar forma al terreno y la aireación. El grosor de esta capa varía según el tamaño de tu recipiente. Es decir, cuanto más pequeño sea el contenedor, más delgada será la capa de rocas.

En cuanto a las piedras grandes, estas las podrás utilizar como decoración en la parte superior del terrario cuando lo hayas terminado de armar. Verás que le darán un toque sofisticado y elegante.

Carbón activado

También necesitarás una fina capa de carbón activado granulado, éste mantendrá fresca la tierra y será útil para evitar la aparición de bacterias, hongos y olores. No hace falta que tengas mucho, solo lo suficiente para cubrir las piedras.

Podrás conseguirlo en floristerías, almacenes con sección de jardinería, algunas tiendas naturistas y hasta en tiendas para mascotas ya que se usa para acuarios.

Tierra

Un elemento esencial será la tierra, precisamente será en ella donde establecerás tus plantas y le darás forma a la parte superior del terrario.

La tierra, compost o sustrato para macetas será ideal. Suele tratarse de una mezcla de tierra, arena fina y abono orgánico que podrás conseguir fácilmente en floristerías o en almacenes con secciones dedicadas a la jardinería.

Sin embargo, podrás encontrar en el mercado otros tipos de tierra para cultivar plantas específicas. Por ejemplo, tierra para helechos o para suculentas, así que puedes optar por esta opción si así lo deseas, por un costo un poco mayor, pero con beneficios adicionales ya que estarán mejor adecuadas.

El recipiente que escojas te indicará la cantidad de tierra que tendrás que usar, para esto, recuerda que lo importante es que las raíces tengan buen espacio para crecer.

Musgo (opcional)

El musgo se suele utilizar en los terrarios para separar la tierra, del carbón y las piedras, para así evitar que se mezclen. Por lo tanto, el musgo te ayudará a establecer mejor las capas, lo que es visualmente hablando más estético, pero también puedes usarlo en la parte superior como parte de la decoración. Asimismo, es bueno para absorber y retener mejor el agua.

El musgo puedes comprarlo en cualquier tienda de jardinería o tomarlo directamente de la naturaleza. En caso de que sea la segunda opción, procura limpiarlo y desinfectarlo bien para quitar todo tipo de bacterias que pueda tener.

¿Qué plantas puedes utilizar?

Antes de comentarte exactamente qué plantas te recomendamos plantar en tu terrario casero, primero te dejamos con ciertos aspectos que debes tener en cuenta.

Selecciona las plantas acordes al tamaño del recipiente. Lo ideal es no tener vegetación que toque los bordes del contenedor, que se salga de él o que las plantas se vayan a ver amontonadas. Para esto, puedes llevar contigo el recipiente cuando vayas a escoger las plantas.

Selecciona plantas de corto crecimiento. Esto claramente para que no interfiera con el recipiente, especialmente en caso de ser un terrario cerrado. Sin embargo, es posible que tengas plantas de rápido crecimiento, pero tendrás que estarles realizando mantenimientos constantes y perdería un poco el sentido del terrario.

Agrupa las plantas según sus necesidades. Puedes utilizar diversos tipos de plantas siempre y cuando tengas en cuenta sus gustos. Por ejemplo, puedes juntar suculentas con cactus, que son de climas secos, o helechos con plantas tropicales, que adoran la humedad.

Dicho esto, vamos con 5 tipos de plantas ideales para tener en un terrario:

Fittonia o planta nerviosa

Es una de las plantas más clásicas para terrarios cerrados por ser de zonas tropicales y amantes de la luz indirecta. Se identifican por las venas de color blanco, verde y rosa que recorren sus hojas y crecen hasta los 15 centímetros.

Es una planta con la que debes tener cuidado en su riego porque si le falta agua, se marchitará rápidamente. Por otro lado, si la deseas propagar solo necesitarás un esqueje de su tallo y colocarlo en un recipiente con agua, en un espacio cálido e iluminado.

Helechos pequeños

Los helechos son plantas sin flor perfectas para los terrarios cerrados. Tienen hojas verdes y brillantes, usualmente con forma de pino. Aunque existen distintas variedades de helechos, a todos les encanta la humedad y la sombra, por lo que cualquier opción que elijas estará excelente.

Suculentas

Las suculentas son plantas que retienen o almacenan agua en mayores cantidades, lo que les permite sobrevivir a largos períodos de sequía en climas áridos. Tienen gran variedad de familias y son bastante diversas, por lo que son muy usadas y altamente recomendadas para terrarios abiertos.

Un aspecto importante si quieres tener un terrario de suculentas, es que debes plantarlas dejando espacio entre ellas. De modo que el aire pueda circular libremente con facilidad y tus plantas puedan crecer en perfecto estado. Por esto también es ideal ubicar el terrario de suculentas cerca de ventanas donde puedan recibir buena ventilación e iluminación.

Cactus

Los cactus hacen parte de la familia de las suculentas, por lo que se caracterizan por acumular agua y nutrientes en sus tejidos.

Son las plantas de moda dentro de los hogares debido a su bajo mantenimiento, a su gran número de variedades y por la facilidad con la que se adaptan al hábitat en el que se encuentran.

Verás que hay cactus con o sin espinas, con o sin flores e incluso tanto grandes como pequeños. Gracias a esto, tendrás muchas opciones para elegir los que más te gusten, según tu estilo.

Bambú de la suerte

A pesar de su nombre, esta planta no tiene nada que ver con el bambú, pero es llamada de esta forma por la similitud de su tallo. Es muy apetecida en los hogares gracias a la creencia de que impregna las casas con buena energía y atrae la buena suerte.

Es una planta perfecta para terrarios abiertos. Es aconsejable que la dejes en un lugar donde haya luz intensa, pero sin que reciba luz solar directa, esto para que broten bellas hojas verdes. Además, es una planta bastante resistente, solo debes procurar no regarla de más.

¡5 pasos para armar tu terrario!

Una vez que tengas listos los materiales requeridos y que hayas escogido qué planta vas a sembrar, es hora de seguir con 5 sencillos pasos para crear el terrario.

  1. Lava bien el recipiente de vidrio para que esté libre de impurezas y cubre el fondo con una capa de piedras pequeñas. Como dijimos anteriormente, un contenedor alto y estrecho requerirá una capa más profunda de piedras de drenaje que uno ancho y poco profundo.
  2. Aplica una capa de carbón activado con ayuda de una cuchara. No hace falta que sea una gran cantidad, únicamente lo necesario para que las rocas estén completamente cubiertas. Por otro lado, si vas a colocar musgo debes remojarlo en agua, exprimirlo para retirar el exceso de líquido y colocarlo húmedo para formar la tercera capa, justo encima de las piedras y el carbón.
  3. Llena el recipiente con la tierra para macetas, puedes ayudarte de una cuchara grande o una pala de mano. Aproximadamente deberías hacer una capa casi del doble de tamaño que las 3 primeras, es decir, la capa de tierra será proporcional a las capas de piedras, carbón y musgo juntas.
  4. Retira la planta de su envase y poda las raíces para dejarlas más cortas, especialmente las que son largas y delgadas, esto ayudará a demorar su crecimiento. Luego realiza un agujero en la tierra según el tamaño de la planta y ponla en su lugar. Si tienes más de una planta, aquí ya será cuestión de ponerte creativo y organizarlas según tu gusto. Como toque final, puedes acompañar la decoración con algunas piedras grandes.
  5. Riega el terrario. Dales a las plantas un poco de agua para ayudar a suavizar el impacto del trasplante. Es importante que estén húmedas, pero no empapadas, así que riega ligeramente.

¿Cómo cuidar tu terrario?

Aunque ya hemos hablado de que los terrarios son básicamente autosuficientes, si debes tomar a consideración diversos aspectos para que te dure mucho tiempo y siga siendo ese bello elemento decorativo en tu hogar u oficina.

  • Ubica el terrario en un lugar donde reciba luz indirecta. Ten presente que son pequeños invernaderos que por dentro mantienen su propio clima, por lo que, exponerlos a la luz directa del sol quemará las plantas.
  • Revisa periódicamente las plantas. En caso de tener un terrario abierto, esto es para controlar que no tenga plagas presentes, sobre todo es importante detectarlas a tiempo para que sean fáciles de eliminar con una simple limpieza a la planta. Si tienes un terrario cerrado, es importante que le quites la tapa de vez en cuando para que entre un poco de aire fresco. Realiza este proceso al menos una vez al mes o en caso de que hayas agregado agua de más.
  • Toca la tierra para ver qué tan húmeda está. Ya que los terrarios se suelen regar aproximadamente cada 15 días, una buena manera para saber si ya es el momento de echarles agua es sintiendo la tierra. Así sabrás si está seca o si no requiere del riego todavía.
  • Si algunas hojas mueren o se marchitan, retíralas de inmediato. Así mantendrás la salud y vitalidad dentro de este pequeño ecosistema. En caso de que la planta por completo muera, sácala y reemplázala.
  • Evita usar limpiavidrios para asear el contenedor. Esto a causa de que las partículas de este tipo de productos pueden envenenar a tus plantas, así que, solo necesitarás un trapo limpio y húmedo para limpiar los bordes de tu terrario.

Ideas de terrarios

Antes de concluir, queremos dejarte esta imagen que te ayudará a tener una mejor idea de cómo es que luce un terrario, en dado caso que sea la primera vez que lees sobre el tema o, para que te sirva de ayuda como inspiración para armar el tuyo.

Conclusión

Como pudiste observar, tener un terrario en tu casa será un elemento excepcional que llenará tu hogar con un poquito de naturaleza. Además, ya tienes todo el conocimiento para armarlo tú mismo, así que, ¡manos a la obra!