9 plagas de jardín más comunes y cómo deshacerte de ellas

¿Las hojas de tus plantas están mordisqueadas o llenas de agujeros? ¿Ves que tus plantas no crecen y están cada vez más débiles? Cada jardinero enfrenta problemas de plagas de vez en cuando y aprender a manejar las pequeñas amenazas es un paso esencial para cultivar un jardín saludable y productivo.

A continuación, encontrarás una lista con las 9 plagas más comunes que podrían llegar a tu jardín o huerto casero, pero especialmente aprenderás a identificarlas y cuando llegue el momento, sabrás cómo controlarlas. Adicionalmente, te mostraremos qué medidas puedes implementar para prevenir la aparición de estos insectos indeseables.

¿Qué son las plagas?

Los jardines son ecosistemas vivientes con gran variedad de organismos que viven en ellos. En su mayor parte, esta rica abundancia de vida es una buena noticia para nuestros jardines.

Sin embargo, para que un insecto se considere una plaga tiene que causar una cantidad significativa de daño. A pesar de que muchos insectos comen plantas, la mayoría de ellos no causan daños importantes o, en la mayoría de los casos, el mal que causan estos insectos no pone en peligro la vida de la planta.

En este orden de ideas, una plaga es un organismo vivo que devora y acaba con las plantas y cosechas. Es así, que las plagas son responsables de dos formas principales de daño a los cultivos.

Primero, está el daño directo hacia las plantas cuando se alimentan de sus tejidos. Esto da como resultado el marchitamiento de los brotes y ramas, disminución del crecimiento y reducción del vigor de la planta por el daño a sus hojas o por la extracción de savia.

En segundo lugar, el daño indirecto se da cuando las plagas hacen poco daño directo, pero transmiten o permiten la entrada de infecciones fúngicas, bacterianas o virales. Lo que produce enanismo, deformación y retraso en el crecimiento o enfermedades que se transmiten de una planta a otra.

¿Cómo prevenirlas?

• Trabaja con la naturaleza creando una diversidad de vida vegetal. Mezcla flores con vegetales para atraer la vida silvestre beneficiosa, como las aves que comen orugas y los insectos, como las mariquitas, que comen pulgones.
• Escoge plantas y variedades que se adapten al lugar y tipo de suelo de tu jardín o huerto. Las plantas que luchan por crecer serán débiles y vulnerables a las plagas y enfermedades. Podrás identificarlo según su textura: Arenoso, es áspero, seco al tacto y no retiene bien el agua. Limoso, es de color marrón oscuro, más suave al tacto y mantiene mejor el agua y los nutrientes. Finalmente, arcilloso, con finos granos de color amarillo, retienen mucho el agua que hasta se forman charcos.
• Inspecciona cuidadosamente todas las plantas nuevas antes de comprarlas en un vivero. Esta es una idea útil para prevenir todos los insectos que aparecerán en esta guía sobre las plagas de jardín y los huertos.
• Separa las plantas para que haya una buena circulación de aire a su alrededor. Las plantas aglomeradas atrapan la humedad y fomentan las enfermedades.
• Finalmente recuerda que, el riego adecuado, la cantidad de luz correcta y una tierra de buena calidad, son esenciales para la buena salud de una planta.

¿Cuáles son las plagas más comunes?

Es importante que identifiques adecuadamente las plagas de jardín más usuales, sus características y el alcance del daño que pueden causar. Así, sabrás qué medidas tomar para combatirlas.

Araña roja

Es diminuta pero persistente e increíblemente dañina. La araña roja es un ácaro que se propaga rápidamente de una planta a otra, gracias a su rápido ciclo de vida y al uso de telarañas.

La araña roja se alimenta del contenido de las células vegetales, lo que la convierte en un enemigo más peligroso. Además, que se reproducen fácilmente gracias a su capacidad de producir hasta 300 huevos en el espacio de unas pocas semanas.

Sabrás que tus plantas están siendo atacadas por la araña roja si observas estos síntomas:

• Puntos blancos en la superficie de las hojas. Verás muchos puntos blancos pequeños que son precisamente los huevos y los ácaros chupando la savia de la planta.
• Finas telarañas a lo largo de la planta. Tendrá la apariencia de una seda delgada que poco a poco se va esparciendo y va cubriendo la planta. Esto impide que la planta reciba buen sol, lo que agranda el problema aún más.
• Hojas secas y caída temprana de las mismas. Como veremos con otras plagas, las grandes infestaciones pueden hacer que las plantas se debiliten drásticamente y, en última instancia, mueran, a menos que se resuelvan rápidamente.

Si deseas mitigar o controlar la araña roja, debes implementar alguno de los siguientes pasos:

Aumenta la humedad. A este ácaro le gusta estar en condiciones secas, así que mantén tus plantas bien regadas. Como opción adicional puedes utilizar tu manguera o regadera, con la boquilla a máxima presión, para así desalojar a las arañas.

Poda las hojas, tallos y ramas infectadas. Si ves que no se compromete la vida de la planta, puedes optar por retirar la materia vegetal infectada y desecharla para evitar su propagación. De igual modo, si ya se cayeron algunas hojas, procura quemarlas.

Atrae a depredadores naturales. Las flores fomentarán la llegada de insectos que ayudarán a eliminar naturalmente a ciertas plagas. Uno de los depredadores más eficaces es la mariquita (o lady bug en inglés) verás que será muy útil en tu jardín o huerto. Para atraerla te recomendamos tener caléndulas, margaritas, geranios, menta o perejil.

Babosas y caracoles

Las babosas son moluscos como los caracoles, pero sin caparazón. Ambos tienen un cuerpo blando y segregan baba mientras se mueven. Cuentan con lenguas ásperas llamadas rádulas, que tienen estructuras microscópicas en forma de dientes. Estas rádulas rompen la comida en pequeños pedazos y causan mucho daño a las plantas y cultivos.

Tanto las babosas como los caracoles se alimentan principalmente de noche y pueden ser de color gris, negro, marrón e incluso naranja. Comen una amplia variedad de vegetales y plantas ornamentales. Se alimentan de hojas, tallos, raíces y tubérculos, así que las papas, la lechuga y el apio corren bastante riesgo.

Si te estás preguntando cómo reconocer la presencia de babosas o caracoles, estos son los síntomas:

• Agujeros irregulares en las hojas. Sus lenguas ásperas crean agujeros circulares y desiguales en todo lo que han estado comiendo. Especialmente les gusta devorar plántulas o plantas jóvenes, son sus favoritas.
• Rastros de limo. Pueden dejar rastros plateados en las hojas, tallos, suelo y superficies a medida que usan el moco o la baba para ayudar a su movimiento.

Bien, ahora vamos con el cómo controlar a las babosas y caracoles. Te daremos algunos consejos:

Utiliza trampas con cerveza. Podrás atraparlos fácilmente, solo debes hundir un vaso o recipiente que contenga cerveza en el suelo, cerca de las plantas que son particularmente vulnerables. Ambos se sentirán atraídos por el olor de la cerveza, caerán y se ahogarán. Recuerda revisar las trampas con regularidad, ya que las babosas o caracoles en descomposición atraerán inevitablemente más de su especie a tu jardín.

Atrápalos manualmente. Para esto tendrás que salir al jardín en la noche con una linterna y quitarlos personalmente de tus plantas. Puedes deshacerte de ellos según tu voluntad, si prefieres no matarlos, asegúrate de llevarlos a un lugar lejos de otros jardines.

Crea barreras alrededor de tus plantas. A las babosas y caracoles no les gusta arrastrarse por ciertas texturas y sustancias de olor fuerte. Por lo tanto, cáscaras de huevo y posos de café (también conocido como cuncho o café usado), serán ideales para proteger a tus plantas. También, colocar cinta de cobre u otros elementos con este metal, ayudará a que estos animalitos se mantengan fuera porque les da una leve carga estática.

Cochinilla

Son unos insectos blancos, de lejos con apariencia de algodón, por lo que también se le conoce como cochinilla algodonosa. Son bastante móviles durante su fase de crecimiento, pero cuando alcanzan la madurez y desarrollan su fuerte armadura con forma de caparazón, se vuelven sedentarios.

Las cochinillas se encuentran en una amplia gama de plantas y las que se encuentran en ambientes cálidos, como las plantas de interior y de invernadero, están particularmente en riesgo. Aunque en el exterior, se pueden encontrar en plantas ornamentales, árboles frutales y arbustos.

Reconocerás la presencia de cochinilla en tus plantas gracias a los siguientes síntomas.

•  Pelusa entre las uniones de la planta. Uno de los mayores inconvenientes al momento de detectarla, es que esta plaga suele desarrollarse en las uniones de las hojas y en la parte de atrás de estas, lo que hace que no sea fácil verla a simple vista.
• Aparición de manchas amarillas en las hojas. Asimismo, reducción en el crecimiento natural de la planta y deformaciones en su tallo, ramas y hojas.
• Atraen a otras plagas como las hormigas. A causa de la melaza, una sustancia azucarada, las hormigas llegan rápidamente a la planta. En cierto modo, para brindar protección a la plaga huésped.

Bien, ahora te enseñaremos cómo combatir a la cochinilla:

Pon en cuarentena a las plantas infectadas. Esto para evitar la propagación de la cochinilla hacia otras plantas cercanas. Por ello, mantén las plantas infectadas separadas hasta que resuelvas el problema.

Utiliza un remedio casero. Solo necesitarás 3 ingredientes: Bicarbonato de sodio, aceite vegetal y vinagre de cualquier tipo. Lo que debes hacer es mezclarlos en cantidades iguales y aplicar este remedio directamente sobre la plaga, puedes ayudarte de un algodón o un trapo. Recuerda esparcir la mezcla por toda la planta, sin olvidar la parte de atrás de las hojas y hacerlo en horas de la mañana o en la noche. Notarás que en aproximadamente 5 horas la cochinilla ya se habrá secado o caído de la planta. En caso de contar con una infestación grande, puedes repetir el procedimiento por un par de días más.

Elimina las cochinillas manualmente. En caso de que apenas esté empezando la infestación, podrás deshacerte fácilmente de ellas si las retiras a mano. Otra opción también es podar los tallos y ramas afectadas, así reducirás el problema.

Escarabajo japonés

Los escarabajos de jardín son insectos destructivos que se alimentan de las plantas durante ambas etapas de su ciclo de vida, desde que son larvas hasta que se convierten en adultos.

Las plantas generalmente pueden resistir el daño causado por los escarabajos adultos. Claro está que no se van a ver estéticamente bonitas, pero no suele hacer que las plantas pierdan su vigor. Son las larvas, que viven bajo tierra y se comen las raíces, los tallos  y los tubérculos, las que causan daños más graves, incluida la muerte de las plantas.

Si tus plantas están sufriendo un ataque por los escarabajos japoneses, presenciarás estos síntomas:

• Hojas “esqueléticas” con muchos agujeros en su interior. El daño comienza con pequeños agujeros en las hojas y a medida que continúan alimentándose, la lámina o pulpa de la hoja se quita y quedan solo las venas.
• Césped de color marrón. Ya que las larvas se alimentan principalmente de las raíces, serán las responsables de que varias áreas del césped se sequen o mueran. Un notable daño hacia tu jardín.
• Mal olor en la planta. En ocasiones, se puede identificar la presencia de esta plaga a causa de un olor desagradable producido por el excremento de sus larvas.

Si quieres saber cómo lidiar con los escarabajos en tu jardín, te presentamos las siguientes opciones:

Quítalos manualmente. Puedes inspeccionar el revés de las hojas en busca de escarabajos adultos y removerlos tú mismo. También puedes revisar alrededor de las raíces, donde seguramente encontrarás larvas blancas semitransparentes con cabezas oscuras, elimínalas.

Poda las hojas y ramas infectadas. El ataque de los escarabajos puede dejar a la planta con un aspecto lamentable, como si estuviera desnuda. Así que, de ser posible, elimina aquellas hojas y ramas lastimadas para darle un respiro a la planta y que se recupere.

Quita las malezas con regularidad. A las larvas también les encantan ciertos tipos de malas hierbas, por lo que estar pendiente de deshierbar ayuda a limitar su propagación.

Mosca blanca

Las moscas blancas son insectos muy pequeños y blancos, a pesar de su nombre, no son un tipo de mosca, aunque tienen alas y son capaces de volar. Suelen agruparse en la parte inferior de las hojas y se dispersan cuando se toca la planta, por lo que son fáciles de detectar.

Se pueden encontrar en una amplia variedad de plantas, desde flores ornamentales hasta vegetales de clima cálido, incluidos tomates, berenjenas y pimentón. También tienen gusto por las plantas de interior, especialmente aquellas con hojas suaves y lisas.

Si tus plantas están siendo atacadas por la mosca blanca, verás estos síntomas:

Podrás controlar la infestación por mosca blanca, con alguno de estos consejos:

Lava las plantas con un chorro de agua fuerte. Esto te ayudará a quitar a esos molestos insectos, especialmente, a los huevos que hayan implantado. Aquellos huevos de la mosca blanca son de color amarillo pálido cuando están recién puestos y marrones cuando están a punto de eclosionar. Si es posible, también puedes sumergir la planta en un balde de agua.

Rocía las hojas con agua y jabón. Esta técnica también te será útil con otras plagas y solo consiste en una mezcla de agua con jabón para platos. Asegúrate de aplicar este líquido en la parte inferior de las hojas y preferiblemente de noche, cuando la temperatura es más fresca. No hace falta que lo retires, no afectará a tus plantas.

Utiliza trampas monocromáticas. Lo único que debes hacer es conseguir pedazos de cartón y pintarlos de color amarillo. Posteriormente, es importante que les apliques algún tipo de pegamento o plástico adhesivo y que ubiques las trampas en lugares estratégicos de tu jardín o huerto. Así, las moscas blancas y algún otro tipo de plaga quedarán fuera de tus plantas.

Orugas

Las orugas son larvas blandas de diferentes colores y tamaños. Como parte del ciclo de vida de las mariposas, ellas ponen los huevos en las plantas y en poco tiempo nacen las orugas. Estas se pueden encontrar en muchas frutas y verduras, plantas ornamentales y árboles de sombra.

Claramente la oruga tiene la necesidad de alimentarse para luego convertirse en una bella y grande mariposa, pero es precisamente por ese fuerte apetito, que es una de las plagas más comunes y dañinas.

Estos son los síntomas de que una planta tiene orugas en ella.

• Hojas con agujeros, especialmente en los bordes. Seguramente sabrás que a las orugas les encanta masticar las hojas y los márgenes de ellas. También suelen cavar túneles en las frutas.
• Acumulación de puntos negros en las hojas. Esto se debe a que son las heces de las orugas. Clara señal de que tus plantas están recibiendo la visita de esta plaga.

Ahora, te contaremos de qué manera puedes deshacerte de las orugas:

Elimínalas manualmente. Gracias a su tamaño, podrás identificarlas con rapidez y extraerlas con tus propias manos en un par de segundos. Procura también quitar los huevos antes de que se eclosionen.

Aplica protección a tus plantas. Mezcla bicarbonato de sodio y harina en cantidades iguales, dependiendo de a cuántas plantas les colocarás esta protección. Posteriormente, aplícalo directamente en las hojas y espárcelo generando una capa protectora. Así cuidarás a tus plantas y evitarás que sigan siendo dañadas por las orugas.

Atrae depredadores naturales. Puedes colocar las plantas que ya han presentado algún síntoma, cerca de plantas aromáticas como albahaca, menta y hierbabuena. Su fuerte olor atrae a las avispas, que se encargarán de eliminar a las orugas.

Pulgones

Los pulgones son pequeños insectos de aproximadamente 6 milímetros de largo, según expertos, tienen forma de pera y largas antenas. Existen aproximadamente 5.000 especies diferentes, pero los más comunes son de color verde claro, blanco, gris o incluso rosa. Por lo general, se encuentran en la mayoría de las frutas y verduras, flores, plantas ornamentales y árboles de sombra.

Estos insectos chupan la savia de la planta, provocando que el follaje se deforme y las hojas se caigan. Tienden a agruparse en el extremo de nuevos brotes en crecimiento y se adhieren a los tallos suaves y verdes.

Si cuentas con una infestación de pulgones, notarás los siguientes síntomas:

• Hojas deformes, atrofiadas, amarillentas o pérdida de estas, lo que claramente debilita la planta.
• Hojas o tallos cubiertos con una sustancia pegajosa. Se trata de la melaza, un líquido azucarado desechado por estos insectos cuando se alimentan de la savia. Esta puede atraer a otros insectos, como las hormigas, que recolectan la sustancia para alimentarse.
• Hojas y ramas oscuras con moho de color negro. La melaza también puede estimular la aparición y crecimiento del hongo fumagina u otras enfermedades de plantas.
• Flores o frutas deformes. Esto también a causa de la alimentación de los pulgones.

Ahora sí, te estarás preguntando cómo minimizar o controlar la infestación de pulgones. Estos son algunos de los métodos que puedes utilizar:

Lava las plantas con un chorro de agua fuerte. Podrás eliminar fácilmente a los pulgones usando tu manguera o regadera, preferiblemente ajustando la boquilla para que el agua salga con precisión y así desalojar a estos insectos. Generalmente esto les impide encontrar el camino de vuelta a la planta.

Espolvorea las plantas con harina. Otra opción es colocar harina en las plantas infectadas, sobre todo cuando tengas una gran invasión de pulgones. Esto les impedirá que se alimenten y que continúen generando daño.

Rocía las hojas con agua y jabón. Puedes deshacerte de los pulgones limpiando o rociando las hojas de la planta con una solución suave de agua y unas gotas de jabón para platos. Esta mezcla se debe volver a aplicar agua con jabón cada 2 o 3 días durante 2 semanas. También puedes optar por comprar jabones insecticidas disponibles en el mercado.

Tijereta

Son insectos de color marrón rojizo con tenazas en el extremo de la cola,que miden hasta 2 centímetros de largo. Corren muy rápido y también pueden volar, aunque rara vez lo hacen. Las tijeretas se pueden encontrar en casi cualquier zona de cultivo, aunque es más probable que habiten en climas cálidos y húmedos.

Pueden ser una molestia en el jardín, puesto que dañan los pétalos de flores como dalias, clemátides, pensamientos y crisantemos. También son amantes de la lechuga, el apio y las frutas.

Sin embargo, las tijeretas también tienen un papel importante en el jardín, ya que se alimentan fácilmente de pulgones, huevos de insectos, gusanos y larvas. Es por ello que, generalmente, las tijeretas no causan suficiente daño como para que valga la pena luchar.

Sin embargo, si ves un gran número de ellas alrededor de tus plantas, podrás observar los siguientes síntomas:

• Hojas, flores y frutos con agujeros. Al igual que las babosas, las tijeretas se alimentan y dejan grandes agujeros irregulares. Lo que te permitirá distinguirlas será la falta de baba o que no haya rastro de lino.
• Olor maloliente cuando se les molesta. Varias especies desprenden y disparan un líquido en modo de protección. Ya que este tiene un olor desagradable, así se defienden cuando se sienten amenazadas.

Puedes considerar tomar medidas para eliminar a las tijeretas de tu jardín:

Coloca vaselina alrededor de los tallos. Esto evitará que las tijeretas se arrastren sobre ellos, lo que les impedirá llegar hasta las hojas, en la mayoría de los casos.

Crea una trampa de aceite. Combina partes iguales de salsa de soja y aceite de oliva o vegetal, colócalo en un recipiente de plástico pequeño y cierra bien la tapa. Haz agujeros en la parte superior del recipiente, lo suficientemente grandes para que entren las tijeretas, luego tendrás que enterrar el recipiente en la tierra justo hasta los agujeros. La salsa de soja atraerá las tijeretas y el aceite evitará que se escapen.

¡No te desanimes!

Gracias a esta guía ya tendrás una mejor idea sobre posibles plagas que pueden llegar a tu jardín o huerto. Así que, cuando llegue el momento y veas a tus plantas lastimadas, no te desanimes y toma cartas en el asunto.

Adicionalmente, ten en cuenta que en todos los casos de plagas puedes optar por usar insecticidas o productos químicos similares, que encontrarás sencillamente en el mercado. En esta ocasión, quisimos brindarte opciones más naturales que no tendrán efectos secundarios en tus queridas plantas.