9 fertilizantes caseros para tus plantas usando sólo 1 producto

Fertilizantes caseros para tus plantas

En ocasiones pasadas ya hablamos sobre la importancia de abonar tus plantas y te recomendamos los fertilizantes químicos más populares. Sin embargo, hay muchos productos que tienes en tu hogar y que puedes usar en tu jardín o huerto casero para darles nutrientes a tus plantas.

Por ello, te invitamos a leer este blog en el que aprenderás sobre los beneficios de crear tus propios fertilizantes. Además, te diremos 9 elementos caseros que puedes utilizar, de qué manera aplicarlos y cómo ayudarán a tus plantas.

Beneficios de crear fertilizantes caseros

Inicialmente, uno de los aspectos para tener en cuenta es que estarás usando elementos que seguramente ya tienes en tu casa, o que sueles tirar a la basura sin sacarles ningún provecho.

Además, gracias a ello estarás ahorrando dinero ya que puedes usar dichos productos que ya tienes para que tus plantas obtengan varios micro y macronutrientes. O, también puedes combinar estos productos con otros fertilizantes de los que se compran en el mercado.

Para ello es bueno que los alternes de modo que las plantas puedan recibir distintos nutrientes y no se sobrecarguen con sólo uno de ellos. Es decir, si este mes usaste el fertilizante Triple 15, el próximo mes puedes agregarles cáscaras de huevo para aportarles calcio y al siguiente usar otro tipo de abono o retornar al fertilizante químico que te acabamos de mencionar.

Finalmente, otro de los beneficios es que estarás aportando nutrientes a las plantas o mejorando la calidad del suelo. De esta forma, vas a apoyar el rendimiento y vigor de tus plantas. Incluso, algunos de los productos que te vamos a mencionar también ayudan a proteger tus cultivos de plagas y enfermedades.

6 fertilizantes caseros usando sólo 1 producto

Ahora sí, te diremos qué productos puedes usar en tus plantas para aportarles nutrientes. Lo mejor es que son elementos fáciles de conseguir o que probablemente ya tienes en tu casa.

Cáscaras de huevo

Recordemos que el macronutriente calcio (Ca) refuerza la estructura de la pared celular de las plantas, además que favorece su proceso de absorción de elementos nutritivos. Y como las cáscaras de huevo están compuestas por carbonato de calcio, son una excelente manera de introducir este mineral en la tierra.

Asimismo, gracias a ese fortalecimiento de la pared celular, las plantas tienen mayor resistencia ante las enfermedades y se protegen sus células para prevenir la invasión de patógenos. Por otro lado, el calcio también influye en la calidad del fruto.

Procedimiento

Para comenzar poco a poco puedes ir almacenando las cáscaras de huevo en lugar de tirarlas a la basura. Eso sí, procura enjuagarlas muy bien y dejarlas en un recipiente abierto donde puedan secarse.

Al realizar este proceso de limpieza ya estás eliminando cualquier bacteria como la salmonela que pueda estar presente. Sin embargo, si quieres tener total seguridad puedes colocar las cáscaras en agua hirviendo o meterlas al horno a 200 °F o 93 °C durante 10 minutos o un poco más.

Posteriormente, te recomendamos triturar muy bien las cáscaras usando una licuadora o alguna otra herramienta que te permita formar un polvo, o que al menos estén lo más trituradas posibles.

La razón, los trozos grandes de cáscara se descomponen demasiado lentamente para servir como enmienda del suelo. Mientras que, cuando se usan bien trituradas o prácticamente en polvo, se degradan con mayor facilidad.

Aplicación

Si será en plantas sembradas en macetas, puedes realizar distintos huecos en la tierra con ayuda de un dedo o una cuchara, pero que estén separados del tallo para evitar que afecte a la planta ya que la intención es que los nutrientes los absorban las raíces.

En macetas pequeñas puedes aplicar lo correspondiente a ¼ de vaso de cáscaras trituradas y ya según el tamaño vas incrementando la cantidad. Eso sí, realiza este proceso 1 vez al mes, ya que sobrecargar la tierra de calcio no será beneficioso para las plantas.

Otra manera de aplicarlas es usando una cuchara o una pala de mano para levantar un poco la tierra en todo el borde de la maceta y esparcirlas allí. Del mismo modo, también puedes colocarlas en el sustrato cuando trasplantes alguna planta.

Para la aplicación en el suelo de tu jardín, simplemente realiza un círculo grande alrededor de la planta, coloca las cáscaras y tápalas con un poco de tierra.

Leche

Así es, esta bebida no sólo es buena para el ser humano, sino que también es beneficiosa para las plantas. Esto gracias a que les ayuda en el crecimiento y cuenta con propiedades antifúngicas y pesticidas.

La leche contiene nutrientes como calcio, vitamina B y azúcares que son buenos para las plantas, pues mejora su salud general y con ello su rendimiento. Como te decíamos, también se puede usar como plaguicida para combatir los pulgones y reducir el impacto del virus del mosaico. Además, funciona como agente antifúngico para prevenir el mildiú polvoroso.

Los microbios que se alimentan de los componentes fertilizantes de la leche también son beneficiosos para mejorar la estructura del suelo. Sin embargo, puede que se genere algo de mal olor durante los primeros días, así que tenlo presente y no te asustes por ello.

Algo que debes tener en cuenta es que este es un fertilizante que se usa y se recomienda entre amantes de la jardinería, quienes hablan desde su experiencia, pero todavía no existe ninguna fuente científica que respalde o valide los beneficios de la leche en las plantas.

Procedimiento

Ahora bien, los implementos que necesitas son: leche entera, agua y una botella. Si bien algunas personas te dirán que funciona cualquier tipo de leche, incluyendo la que viene en polvo, la leche entera conserva más propiedades ya que no ha pasado por tantos tratamientos.

De igual modo, puedes usar leche que se haya vencido. Lo cual será espectacular porque le darás otro uso en lugar de tirarla y a tus plantas les gustará.

Lo que debes hacer es mezclar partes iguales de leche y agua, que preferiblemente sea estancada, de lluvia, o que la hayas dejado reposar un día antes. También puede ser 1 vaso de leche por cada 3 vasos de agua o más y también obtendrás sus beneficios.

Vas a colocar este líquido en una botella con su respectiva tapa para que puedas almacenarlo y podrás tenerlo en tu nevera por 2 meses sin problema.

Aplicación

Es importante que realices la aplicación de manera regular ya que de esta manera tendrás los resultados deseados. Así que puedes aplicar el fertilizante a base de leche 1 vez cada semana en primavera y verano, o 1 vez cada 2 semanas en otoño e invierno.

Puedes aplicarlo en la tierra con ayuda de la botella en la que colocaste el fertilizante o colocar el líquido en una regadera. De todos modos, no hay problema si las hojas reciben este producto, pero es importante que se seque rápidamente y sea antes de que reciba luz solar fuerte.

También es posible que alternes el uso de este producto casero con otros pesticidas o fertilizantes químicos, pero no los uses al mismo tiempo para que no se vayan a afectar los componentes de la leche que ayudan a las plantas.

Café

Cada vez que preparas una taza de café tienes una fuente fabulosa de materia orgánica. Esto gracias a que los posos de café son ricos en nitrógeno, magnesio y potasio, nutrientes esenciales para las plantas. También son naturalmente ácidos, por lo que te ayudarán a aumentar la acidez del suelo.

Recordemos que los posos de café son los residuos que deja la preparación de esta bebida, conocidos también como “cuncho” o “borra” en algunos países. Por otro lado, estos aportan grandes cantidades del macronutriente nitrógeno (N), el cual fortalece los tallos y las hojas de las plantas.

También se puede usar el café granulado o en polvo o la bebida en sí. Sin embargo, qué mejor que utilizar algo que de otra forma sería desechado en la basura.

Procedimiento

Como te comentábamos, los posos de café aumentan el nivel de ácido del suelo, lo cual es bueno para plantas ácidas como las hortensias, las begonias, las rosas, las bromelias, o cultivos como el del tomate, la fresa, entre otros.

No obstante, puedes enjuagar los residuos del café para que su pH sea más neutro y de esta manera no afecte los niveles de acidez de la tierra. Ya esto dependerá del tipo de plantas que tengas en tu jardín o huerto.

Así que simplemente debes recolectar los posos de café después de su preparación. Si prefieres usarlo en líquido, a 1 vaso de café le vas a agregar 1 vaso de agua. Es decir, vas a mezclar partes iguales de agua y café.

Aplicación

La aplicación es muy sencilla. Los posos de café los vas a colocar alrededor de tus plantas, sea en macetas o directamente en el suelo, sin que estén muy cerca del tallo. Ten presente que este método también permite alejar ciertas plagas del jardín ya que no son amantes de su fuerte olor.

El café en líquido simplemente será regando la tierra, tal cual como lo harías en el riego, pero sin tener en cuenta las hojas de las plantas.

Puedes usarlo en tus cultivos 1 o 2 veces por mes según el tipo de plantas que estás abonando. Igualmente, lo ideal es que veas los cambios que han tenido las hojas y las flores, de esta manera sabrás si este fertilizante está funcionando como debe ser.

Cebolla

Cuando vayas a usar una cebolla para alguna receta en tu cocina, no tires su cáscara o piel y úsala para crear un fertilizante orgánico rico en calcio, magnesio, potasio, hierro y cobre. Lo mejor es que puede ser cualquier tipo de cebolla.

De esta manera, tendrás plantas más fuertes y resistentes ante plagas y enfermedades. Además, puedes usar la cebolla en cualquier etapa de la planta, por ejemplo, durante su crecimiento o antes de la floración.

Procedimiento

Es muy fácil, sólo vas a necesitar pieles de cebolla que puedes ir recolectando poco a poco, agua reposada o de lluvia y una botella. Luego, vas a cortar las pieles con ayuda de unas tijeras para que se puedan extraer sus nutrientes con mayor rapidez.

Vas a tomar 1 o 2 puñados de piel de cebolla por cada litro de agua y usarás una botella para almacenar estos productos por al menos 3 días, luego de este tiempo estará listo tu fertilizante.

Aplicación

Puedes rociar tus plantas de manera foliar, que es la aspersión del agua con un atomizador o regadera, de modo que se cubran todas las partes de la planta. O, puedes regar la tierra como de costumbre. Repite este proceso cada 15 días con constancia para que puedas tener resultados gratificantes.

Puedes guardar este fertilizante en tu nevera por 1 o 2 meses. Esto no significa que pasado este tiempo se dañe el producto, sino que ya no contará con las mismas propiedades que tenía al principio.

Cáscaras de banano

Seguramente no se te hace raro que las cáscaras de banano o plátano estén en este top y es gracias a que ellas contienen macronutrientes como el nitrógeno (N), el fósforo (P) y el potasio (K).

Cuando hablamos de los posos de café te mencionamos un poco sobre los beneficios del nitrógeno en las plantas. Pero, por otra parte, el fósforo influye en el crecimiento y desarrollo de las raíces y el potasio participa en la fotosíntesis y facilita la absorción de agua.

Procedimiento

Puedes ir guardando las cáscaras de banano en un recipiente para luego usarlas en este fertilizante, aunque seguramente querrás hacerlo rápido para que no atraiga mosquitos a tu hogar.

Ahora, lo mejor es preparar té con la piel del banano para que sus nutrientes se puedan distribuir en la tierra con mayor facilidad. Pues, sucede algo similar a las cáscaras de huevo ya que, al poner las pieles del banano sobre la tierra, su proceso de descomposición es algo demorado.

Entonces, en 1 litro de agua hirviendo vas a agregar aproximadamente 3 cáscaras de banano trituradas y lo vas a dejar a fuego medio por 10 – 15 minutos. Cuando el líquido haya enfriado lo vas a colar y lo puedes almacenar en una botella. Eso sí, vas a mezclar mitad de té y mitad de agua para su posterior uso.

Aplicación

Vas a regar el té que te acabamos de enseñar a preparar cada 15 días en tus plantas. Puedes mojar los tallos y las hojas sin problema alguno.

Cenizas

Es vital que sea ceniza únicamente de materia orgánica como troncos y periódicos, pues el carbón y el plástico envenenarán tu suelo. Ahora, si tienes chimenea y quieres usar la ceniza que obtienes de allí, también puedes considerar el tipo de madera.

Por ejemplo, si usas maderas duras como el roble y el arce, los nutrientes y minerales en su ceniza serán mucho más altos. Mientras que, si las cenizas se obtienen principalmente quemando maderas blandas como el pino, tendrán menos propiedades.

Entre los beneficios, la ceniza es rica en potasio y carbonato de calcio. Es útil para el control de plagas como las babosas y caracoles ya que la sal que contiene los matará. Además, si tu suelo es demasiado ácido, este producto te ayudará a equilibrar el pH. Aspecto que debes tener presente para no usar este fertilizante en plantas ácidas.

Aplicación

Ya que no requiere de ningún tipo de procedimiento, pasemos directamente a la aplicación. Lo único que debes hacer es tomar un puñado de cenizas y aplicarla alrededor de la planta. Puedes incrementar la cantidad si son plantas de mayor tamaño.

Es bueno que las apliques en un día que no haga mucho viento o en un lugar lejos de corrientes de aire para que no se vayan volando. Por otro lado, te recomendamos usar elementos de protección como guantes, mascarilla o tapabocas y gafas.

Finalmente, realiza este procedimiento 1 vez al mes, pero te recomendamos alternarlo con otro tipo de abono orgánico o químico.

3 enraizantes orgánicos y efectivos para tus plantas

Ahora, vamos a recomendarte 3 fertilizantes caseros que son especiales para ayudar al enraizamiento de tus plantas o esquejes.

Canela

La canela como agente de enraizamiento es tan útil como cualquier hormona química que puedas conseguir en el mercado. Además, es mucho más económica y te servirá también para usos dentro del hogar.

Entonces, la canela puede estimular el desarrollo de las raíces en casi todos los tipos de plantas y basta con una sola aplicación.  Lo mejor es que al hacer esto también las proteges ante la aparición de enfermedades, sobre todo con los brotes que están en crecimiento.

Asimismo, si tienes una planta con alguna herida, puedes aplicarle canela para ayudarle a sanar. Finalmente, si tienes problemas con las hormigas, este producto es un buen elemento para disuadirlas ya que a ellas no les gusta caminar sobre este polvo.

Aplicación

Si tienes la canela en frasco, solo bastará con que tomes el esqueje y le espolvorees un poco del polvo en toda la base. Puedes hacer lo mismo si estás trasplantando una planta y quieres fortalecer sus raíces.

Si la tienes en bolsa, para que tengas mayor comodidad, puedes colocar un poco en una servilleta y la envuelves en el tallo para impregnarlo de canela.

Lentejas

Las lentejas tienen una alta concentración de auxinas, que son un grupo de hormonas vegetales que actúan como reguladoras del crecimiento y provocan la elongación de las células de la planta. Es por ello que se usan como enraizantes naturales para promover el desarrollo radicular y que así la planta tenga mayor fuerza y crezca con vigor.

Si bien puede ser un proceso más largo que cualquiera de los otros productos que te mencionamos en este top, te aseguramos que valdrá totalmente la pena.

Procedimiento

Vas a tomar un recipiente amplio y en él vas a poner 1 vaso de lentejas en 4 vasos de agua. Luego debes poner un trapo o una toalla encima para tapar el recipiente y debes dejarlo en un lugar oscuro por 8 horas o por toda una noche.

Al día siguiente, vas a retirar el agua de las lentejas, pero procura almacenar este líquido en un plato porque lo vas a necesitar más adelante. Puedes ayudarte con un colador por si se cae una que otra lenteja, aunque tampoco hace falta que quites toda el agua, con que retires el exceso está bien.

Nuevamente tendrás que colocar el trapo para tapar el recipiente y lo dejarás reposar hasta el otro día.

Pasada la noche, verás que las lentejas han sacado un poco de raíz, sin embargo, necesitamos que crezcan todavía más. Para ello, vas a tomar el agua que habías almacenado y la vas a echar en el recipiente para humedecer las lentejas. Posteriormente, debes retirar el exceso de agua y otra vez tenerla en un plato para usarla después.

Recuerda colocar el trapo encima del recipiente para darles oscuridad a las lentejas y las dejas así durante toda la noche.

Tendrás que repetir este último proceso por 2 días más.

Cuando haya pasado el tiempo, en la licuadora vas a colocar las lentejas, el agua que has venido usando desde el principio, una taza más de agua y licuas todo muy bien. Luego, pasas la mezcla por un colador y te ayudas con una cuchara ya que será una sustancia espesa.

Finalmente, tienes que diluir 1 vaso del enraizante de lentejas por cada 10 vasos de agua y así ya estará listo para que lo uses en tu jardín o huerto.

Aplicación

Para el primer método puedes dejar los esquejes en un vaso con este enraizante por 1 o 2 semanas. Eso sí, para que funcione es importante cambiar el líquido cada 2 días, aunque no hace falta que lo botes, ya que puedes aplicarlo en tus otras plantas.

Pasadas las 2 semanas igual debes mantener los esquejes en el vaso, pero con agua natural preferiblemente de lluvia o estancada. Una vez hayan desarrollado varias raíces será el momento de sembrarlos en la tierra.

Para el segundo método, tendrás que dejar los esquejes durante 1 noche en un vaso con el enraizante. Al día siguiente ya puedes colocarlos en tierra, de preferencia que sea en una maceta. Finalmente vas a regarlo cada 3 días con este mismo líquido durante unas cuantas semanas.

Sábila

El gel del aloe vera cuenta con propiedades que ayudan a cicatrizar heridas y esto no sólo cuenta para los seres humanos, sino que también aplica en las plantas.

Del mismo modo, al igual que las lentejas, contiene hormonas vegetales que ayudan a estimular el crecimiento de nuevas raíces, a la germinación de las semillas y a aliviar el impacto del trasplante.

Procedimiento

Para usar el gel de la sábila siempre debes retirarle el acíbar que contiene, conocido popularmente como el “yodo”. Para hacerlo, deja la hoja en un recipiente con agua durante toda una noche de manera vertical, al día siguiente verás que el agua ha tomado un tono amarillento.

Aplicación

Es muy sencillo, únicamente corta un pequeño pedazo de la hoja, retírale la piel y podrás observar el gel que trae en su interior. Entonces, vas a tomar el esqueje y vas a pasar su tallo por dicho gel para que quede completamente empapado de esta sustancia viscosa.

Después puedes ubicar el brote en su respectiva maceta o suelo. Algunas personas prefieren dejar que el esqueje cicatrice un poco esperando 24 horas antes de sembrarlo. Nosotros te sugerimos aplicar este método en plantas suculentas ya que su tallo suele ser más grueso y queremos evitar que la planta se pudra.

Recomendaciones finales

Como te decíamos al principio, es bastante aconsejable alternar los fertilizantes cada mes, de modo que las plantas reciban distintos nutrientes y no cantidades exageradas de uno solo.

Asimismo, es bueno que tengas presente qué tipo de planta quieres abonar y cuáles son los nutrientes que ella más necesita. Tal cual como te comentábamos con el uso del café que es preferiblemente para plantas ácidas.

En conclusión, esperamos que te haya gustado este blog, pero sobre todo que hayas aprendido qué elementos caseros son perfectos como fertilizantes y/o enraizantes para tus plantas.

Como pudiste observar, en muchos de los casos son incluso implementos que solemos desechar en la basura, así que anímate a probar al menos 1 de estos fertilizantes caseros y estamos seguros de que no te arrepentirás.

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