Cómo construir tu huerto urbano en 5 pasos muy fáciles

¿Alguna vez te has preguntado cómo puedes construir un huerto para poder sembrar tus plantas? Pues llegaste al blog indicado. Ya debes saber que puedes utilizar diversos materiales como macetas o recipientes reciclables para sembrar algunas especies de plantas. Sin embargo, existe la posibilidad de que no sea un espacio suficiente y requieras de una estructura más amplia para tus plantas.

Estas estructuras nos permiten cultivar las plantas que queramos, sin tanto límite de espacio, para poder disfrutar de sus maravillosos beneficios a una escala doméstica. La ventaja es que existen varias maneras de crear un huerto y se pueden ubicar en diversos espacios sin importar el tamaño.    

Es por eso que en esta ocasión quiero hablarte sobre cómo iniciar la construcción de tu huerto urbano, qué es un huerto urbano, los beneficios que posee, los tipos que existen y los materiales que puedes utilizar para construir paso a paso el huerto.

¿Qué es un huerto urbano? 

Se define al huerto urbano como un espacio al interior o exterior que funciona para el cultivo de frutas, hortalizas, legumbres, plantas aromáticas, medicinales, ornamentales, entre otras especies, a escala doméstica.

Esta práctica funciona para minimizar el impacto que causa la agricultura en el medio ambiente. Pues cuando la agricultura no se maneja de manera adecuada, se presentan desperdicios de agua, contaminación ambiental por el transporte de los alimentos, contaminación del suelo y fuentes hídricas por pesticidas y fertilizantes manipulados inadecuadamente, deforestación, entre otros aspectos.

Además, los huertos urbanos aportan una serie de beneficios que favorecen a todos aquellos que estén involucrados con estos, sobre todo los más pequeños del hogar. Dichos beneficios dependen del tipo de huerto que tengas, más adelante te hablaré de ellos, pero en general son los siguientes.

  • Los huertos urbanos te permiten tener contacto con la tierra y la naturaleza
  • Motivan a niños a querer probar lo que cultivas como frutas y verduras
  • Brindan la posibilidad de pasar tiempo en familia o con la comunidad
  • Los niños podrán aprender sobre el aspecto, cuidado e importancia de las plantas
  • Contribuyen a que las personas adquieran responsabilidades, sobre todo para los más pequeños
  • Podrás obtener alimentos frescos y limpios en tu propia casa
  • El cultivo te ayudará a aliviar el estrés
  • Tanto tú, como las demás personas que se beneficien del huerto, podrán ahorrar mucho dinero
  • Ayudan a reducir agentes contaminantes que se encuentran en la ciudad y afectan la salud de las personas
  • Los niños podrán aprender sobre la importancia del cuidado ambiental y la protección de estos recursos alimenticios
  • Los huertos urbanos ayudan a evitar el uso de plásticos de empaque que contaminan

Además de cuidar el medio ambiente, es importante tener un huerto urbano para evitar afecciones como el estrés, la ansiedad, la depresión y problemáticas como la inseguridad alimentaria.

Pues como su nombre lo dice se ubica en la ciudad y factores como las construcciones, el tráfico, diversos olores, ruidos, la falta de recursos y demás, nos alejan de los ambientes naturales y tranquilos y crean desigualdad en la población.  

5 tipos de huerto urbano

Como te comentaba anteriormente, existen unos tipos de huertos que pueden crearse en un ambiente diferente al de los campos. Estos contribuyen a que la población se beneficie de distintas maneras y se logre un bien común.  

Huertos domésticos

Estos son los primeros huertos que se nos vienen a la mente cuando escuchamos este término de huerto urbano. El objetivo que tienen los huertos domésticos es el del autoconsumo y puedes tenerlos al interior y al exterior del hogar.

También tienes la posibilidad de usar el espacio del jardín, unas macetas o incluso los llamados jardines verticales. Estos últimos tienen varias maneras de construirse que te serán muy útiles, por medio de palés, bolsas, con material reciclable o hidropónicos. El estilo que escojas dependerá del espacio con el que cuentes.

Algunas veces las frutas, verduras, hortalizas y legumbres que venden en los mercados son muy costosas o pueden presentar agentes contaminantes por una mala manipulación. Es por ello que varias personas han tomado la decisión de cultivar sus alimentos, de ahí el autoconsumo.

Claramente no es una producción a gran escala y, además, no todas las plantas se desarrollan igual. Pero sí te da la opción de conseguir alimentos económicos, frescos y limpios para ti y tu familia.

Lo importante es conocer las características y condiciones de las plantas que quieras sembrar para que les puedas asegurar un desarrollo óptimo y múltiples beneficios para tu salud y bolsillo.

Ten en cuenta que el primer paso es saber qué tipos de plantas sembrar para así poder escoger la mejor estructura del huerto. No olvides la ubicación, pues debe ser la ideal para la especie que vayas a sembrar, algunas prefieren sol directo, otras la semisombra y otras tienen preferencia por los lugares con sombra.

Finalmente, cuando siembras en macetas debes proporcionar al sustrato los nutrientes necesarios para que las plantas puedan absorberlos y crecer adecuadamente. Como el ideal de los huertos urbanos es reducir los impactos ambientales, te recomiendo el uso de abonos orgánicos, pues así se va a mantener el objetivo y también aportas tu granito de arena.

Ejemplo de huerto doméstico con macetas
Tomada de Pinterest

Huertos municipales

Estos huertos son manejados por los ayuntamientos o alcaldías de una determinada región. Los encargados del cuidado y cultivo en este tipo de huertos son aquellas personas de la comunidad que pertenecen a algún grupo social, ancianos o fundaciones sin ánimo de lucro.

Los cuidados se realizan son por un tiempo definido y tienen como fin enseñar a aquellas personas inexpertas a cultivar y cuidar las plantas.

Además, este tipo de huerto permite la inclusión social, factor que se ha visto afectado últimamente, pues las personas tienen otros intereses. Y, como te mencionaba antes, funciona como una actividad física para aquellos de la tercera edad.  

Las alcaldías se encargan de proporcionar el espacio, el agua, las herramientas y demás objetos que se necesiten para el cultivo de alimentos. Y gracias a que es un trabajo de la comunidad, se da el ejemplo a las nuevas generaciones para que tengan más conciencia del medio ambiente.

Si en tu ciudad existe un huerto de este tipo, anímate a participar en él, compartirás con muchas personas interesadas en el cuidado ambiental y el consumo saludable de alimentos. Además, te ayuda a distraerte de la rutina diaria y a aprender de algo nuevo.

Ejemplo de huerto municipal cuidado por personas ancianas
Tomada de Pinterest

Huertos didácticos

Estos huertos se asemejan al tipo anterior pues están diseñados para enseñar a aquellos inexpertos sobre los cultivos. La diferencia es que los huertos didácticos se enfocan en los colegios y funcionan para educar a los niños y adolescentes.

Cuando un colegio contribuye a la creación de estos huertos en sus instalaciones les da la posibilidad a tus hijos de tener un contacto directo con la naturaleza, crear lazos afectivos con su alrededor, comprenden de mejor forma el cuidado del agua y los alimentos.

Estos huertos también ayudan a que tus hijos desarrollen el sentido de la responsabilidad, tengan facilidad para trabajar en equipo, sientan empatía por otro ser vivo, se esfuercen para obtener buenos resultados y para que puedan adquirir hábitos saludables.

Además, los huertos pueden crearse en macetas, directamente en el suelo, con materiales reciclados o en mesas de cultivo. Todo dependerá de los recursos del colegio y el interés de la comunidad educativa con respecto a este proyecto de huerto didáctico.

Ejemplo de huerto didáctico en una escuela
Tomada de Pinterest

Huertos comunitarios

Estos huertos son creados en espacios comunes que pueden ser públicos o privados. Los encargados de mantener y cuidar los cultivos son las personas de la comunidad, sobre todo los vecinos.

Son también llamados huertos sociales y además de brindar alimento fresco para las personas, ayudan a incrementar las zonas verdes en la ciudad, funcionan como un filtro en contra de la contaminación y brindan la posibilidad de compartir en familia y con amigos o vecinos.

Este tipo de huertos ayuda a que las personas desarrollen ese compromiso social tanto por su comunidad, para lograr un objetivo en común, como por el medio ambiente, pues como ya sabes es un factor que requiere de nuestra atención urgente para evitar más daños.

Ejemplo de huerto comunitario creado por los vecinos de una comunidad
Tomada de Pinterest

Huertos terapéuticos

Este último tipo de huerto se puede encontrar en lugares de reposo para ancianos, clínicas de rehabilitación, cárceles o centros de atención a personas con discapacidad. Y la razón es porque son usados para complementar algún tratamiento terapéutico de personas que se encuentren en estos lugares.

Los huertos terapéuticos ayudan a mejorar la calidad de la salud física y mental de las personas. Además, no es necesario recurrir a herramientas muy costosas para su elaboración, ni a tratamientos muy sofisticados para ver los resultados en las personas.

Ejemplo de huerto terapéutico para una persona con discapacidad
Tomada de Pinterest

¿Cómo construir un huerto urbano de exteriores? 

Ahora que ya conoces un poco más sobre la importancia que tienen los huertos urbanos y que ya cuentas con la información necesaria para empezar a sembrar cualquier tipo de planta, te explicaré el paso a paso para que puedas construir el huerto que desees.

A continuación, encontrarás los materiales y las instrucciones para crear un bancal de madera. Estos son secciones que dividen los cultivos del resto del terreno. Los materiales que necesitas para un bancal de gran tamaño (2,5 m X 1 m X 40 cm) son:

  • 4 tablones de madera (puede ser de pino) de 2,5 metros de largo, 5 cm de grosor y 20 cm de ancho cada una 
  • 4 tablones de madera de 1 metro de largo, 5 cm de grosor y 20 cm de ancho cada una
  • 4 postes o tacos de madera de 7×7 cm de ancho y de 40 cm de largo cada uno para reforzar los tablones
  • Metro
  • Tornillos de 120 mm
  • Un nivel
  • Un taladro para perforar la madera y ajustar los tornillos
  • 4 sargentos o prensas

Paso 1. Selección del terreno y la superficie de trabajo

Estos bancales los puedes ubicar en un jardín amplio con tierra, un espacio abandonado como los huertos comunitarios, en piso de concreto o baldosa, en el colegio de tus hijos o incluso sobre mesas resistentes. No importa el tipo de espacio que dispongas, siempre puedes adaptar la construcción del huerto a tus condiciones y necesidades.

Para iniciar a construir tu bancal es importante que trabajes sobre una superficie plana para que no corras ningún accidente y las maderas queden bien ajustadas. Una vez tengas tu lugar de trabajo listo, procedes a atornillar los laterales de la madera más grande sobre los postes.

Vas a usar 2 tornillos en los dos extremos de cada tablón y los ajustas de tal manera que los tablones y el poste estén lo más nivelados posible. Puedes apoyarte sobre los tablones con la rodilla para que te sea más sencillo atornillar. Deben quedar como la imagen de abajo:

Paso 2. Atornillar y nivelar los tablones

Una vez tengas listos los tablones grandes, vas a ubicarlos en el terreno de manera vertical, tal y como están en la imagen anterior. En este paso vas a agregar el primer tablón de 1 metro de largo para cerrar el bancal.

Para este paso es necesario que uses las prensas o los sargentos y el nivel, pues antes de atornillar a los postes, los bancales deben estar lo más nivelados y alineados posible.

Uso del nivel para asegurar que los bancales qesten alineados
Prensas para ajustar los postes y bancales

Una vez tengas cada tablón ajustado y a nivel, podrás atornillar. Sin embargo, te recomiendo que primero empieces por una esquina y revises las demás pues se pueden desacomodar.

Ajusta y nivela todas las veces que sea necesario con la ayuda de las prensas y el nivel, de esta manera será mucho más sencillo atornillar todo. También debes usar 2 tornillos por tablón.

Se atornillas los postes una vez estén nivelados

Paso 3. Ubicación del bancal en el terreno escogido

Antes de atornillar el segundo tablón de 1 metro, debes ubicar el bancal en el terreno, pues a medida que se le va agregando la madera, su peso incrementa y puede ser incómodo acomodarlo después.

Si tienes más bancales, los vas a ubicar a 70 cm de distancia uno del otro, puedes tomar la medida con ayuda del metro para que sea más precisa. Esta distancia es para que puedas tener el espacio suficiente entre los bancales y sea sencillo manipular las plantas desde cualquier lado.

No tiene que ser exactamente esa distancia, puedes dejar el espacio que consideres necesario. Esta es más una medida para guiarte. Una vez que tengas ubicado el bancal, procedes a atornillar el segundo tablón de 1 metro para cerrarlo.

El proceso es exactamente el mismo que el del paso anterior, usas el nivel para alinear las tablas y las presas para ajustar antes de atornillar. Una vez estés con la seguridad de que todo está alineado puedes atornillar.

Puesta de los segundos bancales

Paso 4. Nivelación del exterior del bancal, lijar y pintar la madera

Ya terminado el bancal y ubicado en el terreno, vas a adecuar el suelo alrededor. Pues de esta manera quedará nivelado y se verá mucho mejor el huerto. Puedes añadir un poco más de tierra si es necesario.

Nivelación del terreno alrededor del bancal

En caso de que la madera tenga imperfecciones, como astillas, puedes lijar los bordes. Esto te ayudará a evitar cualquier tipo de accidente, sobre todo si hay niños o ancianos alrededor.

Si gustas puedes dejar la madera en su color natural, pero si quieres que se vea vistoso tu bancal puedes aplicarle nogalina. Es un colorante natural que se utiliza para teñir la madera y no es tóxico para las plantas.

Detalles finales para personalizar el bancal

Mezclas la nogalina con agua templada y la aplicas a la madera con una esponja o una brocha. Puedes hacerlo antes de ubicar el bancal en el terreno para que sea más fácil pintar todo.

Evita usar algún tipo de barniz o pintura diferente a la nogalina, pues pueden provocar que se tapen los poros de la madera y se pudra.

Paso 5. Relleno del bancal

En este punto ya estará listo el bancal, así que puedes rellenarlo. Añades una capa de tierra vegetal o la que tengas en el terreno, una capa de estiércol ya procesado y una capa de compost, esto se conoce como sustrato universal y servirá para la mayoría de plantas comestibles de huertos casero. Recuerda que todos estos elementos los puedes adquirir en tiendas especializadas o viveros, si te queda más fácil de conseguir.

Se agrega al bancal el sustrato o la tierra

Vas a mezclar toda la tierra muy bien con la ayuda de una pala y un rastrillo, esto te ayudará a dejarla lista para sembrar las plantas.

Nota: Recuerda que puedes hacer el bancal o el huerto urbano del tamaño que desees, según el espacio que tengas (interior o exterior) y los materiales con los que dispongas. Las medidas que te he comentado para el bancal sirven para guiarte, pero no tienen que ser estrictamente esas.

Luego de construir la estructura de tu huerto, probablemente pensarás: “¿Ya hora qué? Bueno, en blogs anteriores del Club de Jardinería tienes una guía para sembrar diversas plantas, cómo cuidarlas y las especies que puedes cultivar de manera sencilla en el huerto urbano que acabas de crear. A continuación, te dejaré una lista de estos blogs para que puedas acceder a la información más detallada.


Espero que te haya sido de gran utilidad este blog sobre cómo construir un huerto urbano. Como ya sabes, puedes escoger cualquier tipo de huerto y empezar con el proyecto, no te arrepentirás.

No olvides revisar nuestros blogs sobre las plantas aromáticas, medicinales, ornamentales y hortícolas para conocer sobre sus necesidades y exigencias. Así será más sencillo poder cultivarlas en los huertos. ¡Manos a la obra!  

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